Siguiendo una Conversa Solidaria: Educación y Liderazgo para fortalecer la intercooperación
Encontrando caminos solidarios en ésta época de pandemia, surgió hace poco la Conversa Solidaria, una reunión en línea, que se convirtió en un programa semanal, dirigido por Darío Castillo, destacado cooperador e internacionalista, residente en Canadá, quien lo inició con el apoyode la Universidad Antonio Nariño, de Colombia y con la participación de Mauricio Navas, administrador y líder de nuestro periódico Perspectiva. Este interesante programa es hoy un espacio de diálogo al cual se han ido sumando diferentes integrantes de la economía solidaria y organizaciones de diferentes países.En el programa se trata una variedad de temas con lo que se pretende, además de analizar la problemática de este importante sector, encontrar iniciativas y propuestas para generar sinergias que permitan marcar un derrotero en ésta coyuntura de dificultad e incertidumbre de la humanidad y particularmente de las formas empresariales sociales y solidarias en esta región.En esta oportunidad se hará referencia al programa en el que se abordó el tema de la Educación y el Liderazgo para fortalecer la intercooperación. Con la participación de la invitada principal, María Eugenia Pérez, Directora Ejecutiva de la Asociación Colombiana de Cooperativas, ASCOOP yPresidenta del Comité de igualdad de género de la Alianza Cooperativa Internacional, ACI, se dio la intervención y debate entre líderes y cooperadores de México, Costa Rica, Argentina y Colombia.A manera de resumen de los diferentes puntos de vista y aportes a la discusión de este coyuntural tema, a continuación se consigna de manera libre el aporte de la invitada y de los asistentes que intervinieron, en procura de compartir con los lectores los aspectos más sobresalientes de esta Conversa, que les permita formarse su propia opinión. De los argumentos del moderador: El líder es el que tiene seguidores, los líderes son los que generalmente dan línea. El liderazgo de representación gremial implica un desafío muy grande de cara a las necesidades y urgencias del sector. Tenemos el desafío de construir un liderazgo diferente o ¿cómo estamos, estamos bien? o ¿se puede mejorar? ¿Cuál es esa visión de liderazgo que la convoca y que sedebe transformar?De las intervenciones de María Eugenia Pérez destacamos las siguientes expresiones: La educación es el cambio, es un tema importante. Los nuevos líderes tienen poca información cooperativa, sólo tienen capacitación empresarial, lo cual es un gran riesgo para el sector. La preocupación de estos líderes es por el volumen de excedentes, olvidando el tema cooperativo para los asociados. Hoy nos han cambiado los paradigmas, pero el liderazgo cooperativo no ha cambiado y tenemos que cambiar muchas cosas. El liderazgo gremial hace incidencia en las políticas públicas, debemos hacernos visibles y actuantes en las políticas públicas. Vivimos como en una célula, hacemos mucho por los nuestros pero no somos visibles ante el Estado y las políticas públicas; hay que incidir en las políticas públicas y fortalecer el cooperativismo mediante la integración. Incidir en los planes de desarrollo en los distintos niveles, lo que implica inclusión social, inclusión económica. Somos un buen proyecto empresarial para el desarrollo social. Se hace necesario tener una visión de corto, mediano y largo plazo, debemos estar claros en los dos mundos: en el mundo cooperativo y en el mundo de lo público. Podemos hacernos más visibles y de impacto en nuestras comunidades, para construirles un mejor estar, unas mejores condiciones, para subir el nivel de vida de la gente. Se necesitan líderes con visión, con nuevas posturas, que hagan innovación. El Covid-19 nos muestra que el mundo cambió, que debemos tener una visión distinta para ver cómo cambiamos. Si no tenemos esa visión para trabajar en equipo, la integración a veces se convierte en un discurso. Tenemos líderes que siempre han estado pero se requiere trabajar en equipo, tener claridad de lo que se quiere. Es necesario borrar ese individualismo que muchas veces tenemos, si cambiamos podremos alcanzar una visibilidad real, hay problemas de idiosincrasia, individualismos; nos frena el liderazgo que podríamos tener como sector,tenemos que ceder muchas de las cosas para trabajar en equipo. Hay empresas muy exitosas, pero no lo son todas. Tenemos que trabajar, decirnos las cosas, trabajar para lograr esa unión para un liderazgo propositivo y benéfico para el sector. El cooperativismo financiero puedetener mucha responsabilidad y oportunidad para apoyar otros sectores, el productivo, el agropecuario, el trabajo asociado que ha sido estigmatizado. Debemos hacer un liderazgo colectivo donde tengamos unas banderas, rompiendo las dificultades que tenemos.El liderazgo del sector solidario. Necesitamos formación cooperativa de los líderes y tener contacto con los asociados. No tenemos que pensar en chiquito, somos una economía para hacer grandes desarrollos en lo social y lo económico. Nos hace falta la construcción de redes de integración cooperativa. En este tema la ACI lucho mucho, promoviendo cooperativista compra cooperativo, redes.Debemos comprar lo cooperativo pero exigir, buscar el progreso de la cooperativa y el bienestar del asociado. A la mujer hay que darle el rol que se merece, que le corresponde; somos la mitad de lo cooperativo, hay que buscar una equidad consciente y responsable; también convocar a los jóvenes, buscar herramientas que vitalicen ese vínculo. La tecnología nos obligó, para nosotros es muy importante el contacto y nosotros debemos cambiar, es un punto de quiebre, buscando ser sincrónicos, generar unos liderazgos gremiales. Ahora estamos muy unidos haciendo consensos entre Ascoop, Confecoop, Fecolfin, Analfe, las mutuales, etc.De las intervenciones de asistentes de Argentina, Colombia y México: Qué tipo de liderazgo necesitamos. El sector cooperativo tiene la semilla del cambio y la transformación, pero debe abrirse de conceptos; orientarse al bien común y que trascienda.Llamo la atención en que la educación no es suficiente. Habría que cuestionar cómo estamos haciendo la educación y la formación. Mi gran aprendizaje es que puedes hacerlo más didáctico y se es exitoso o no se es. El problema está en la persona, en su contexto, su trayectoria personal y profesional, esto es lo determinante en su papel. Al tema de la meritocracia le tenemos que dar un revolcón, la meritocracia basada en cartones no es garantía, necesitamos agentes de cambio. Pensemos