El Foro Económico Mundial de Davos (Suiza) se desarrolla a partir de hoy 21 y se extenderá hasta el próximo 24 de enero, está será la edición cincuenta y tendrá 2.800 participantes.
Cerca de cincuenta jefes de Estado, de gobierno y personalidades de todo el mundo participarán en el evento, entre ellos el presidente estadounidense Donald Trump y la activista sueca por el clima Greta Thunberg. No estará, sin embargo, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zarif, al que se espera, en plena tensión con Estados Unidos. También estarán el viceprimer ministro chino, Han Zheng y la canciller alemana Angela Merkel.
El Foro tendrá como
objetivo ayudar a los gobiernos e instituciones internacionales a
avanzar hacia el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo
Sostenible, así como facilitar el debate sobre tecnología y gobernanza
empresarial.
“Nuestros esfuerzos para mantener el calentamiento global limitado a 1,5°C se están quedando peligrosamente cortos”, remarca el fundador y presidente del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, en un comunicado. “Con el mundo en una encrucijada tan crítica, este año debemos desarrollar un Manifiesto de Davos 2020 para reimaginar el propósito y los cuadros de mando para las empresas y los gobiernos”.
Esta cumbre abordará los
desafíos clave del mundo este año, divididos en seis áreas: impulsar la
ecología y una respuesta a los retos del cambio climático, lograr una economía
más inclusiva, crear un consenso global sobre el despliegue de tecnologías de
la cuarta revolución industrial, volver a capacitar y mejorar a mil
millones de personas en la próxima década, crear puentes para resolver
conflictos globales y ayudar a las empresas a crear los modelos necesarios para
impulsar la cuarta revolución industrial.
Una
cumbre más sostenible
Es la cumbre anual más sostenible de todas las celebradas hasta la fecha. Así, ha logrado el estándar IS0 20121 para eventos sostenibles y será totalmente neutral en carbono. Las iniciativas implementadas para lograr este objetivo incluyen el uso de proveedores de alimentos de origen local, la introducción de fuentes alternativas de proteínas para reducir el consumo de carne, el suministro de electricidad 100% renovable y la reducción o eliminación del uso de materiales que no pueden reciclarse o reutilizarse fácilmente, así como la introducción de más vehículos eléctricos.